Soy Akira, nombre de origen japonés, pero ¿Por qué Akira? Es un nombre que no tiene sexo, igual que nuestra alma, no nos identificamos como hombre o mujer hasta que elegimos la tierra y el sexo. Su significado es luz, dulce, cálido. Un alma de luz destinada a ayudar.

A unas almas nos cuesta más que a otras despertarnos cuando estamos en el plano terrenal, pero al final con pequeñas chispas de arriba lo vamos consiguiendo. Posiblemente no nos despertamos como nos gustaría porque para ello hemos de haber aprendido el significado de daño, sufrimiento y dolor que se tiene como ser humano. Aprender a sanar ese dolor tanto psíquico como físico, aprender a parar los ataques psíquicos y mentales, es aprender a hacernos a nosotros mismos. Entender y llegar a curarse significa poder ayudar a los demás de igual manera. Estamos aquí para aprender y ayudar. Mi camino ha sido, y es largo, siete años ayudando a personas como tú con resultados positivos, a que puedan continuar adelante sin ningún tipo de obstáculo con el éxito garantizado, siempre con luz.